Esto lo escribí hace 2 meses, me había olvidado de publicarlo, aqui está.!...
Hoy es jueves 27 de agosto de 2009, ya pasaron tres meses de mi salida de argentina y otro tanto de dejar mi trabajo. Y como todavía sigo sin actividad productiva me deja mucho tiempo al dope para pensar boludeces y por ahora tengo varias sensaciones encontradas. Por un lado ya estoy comenzando a extrañar bastante, los amigos y la familia pesan mucho. Se extrañan los asados, los mates entre amigos charlando, la cervecita en el centro los sábados por la noche, las charlas en la oficina sobre la vida de cada uno o sobre los personajes nefastos de la empresa. Pero por otro, en este momento estoy convencido que estoy en el lugar correcto porque estoy disfrutando mucho, observando y también viviendo mucho otra realidad a la que ya conozco. Conociendo gente muy cálida, con maneras de relacionarse idénticas a las nuestras.
También les cuento que sigo día a día lo que sucede en argentina, ya que la tecnología permite leer los diarios, escuchar la radio que me hacía reir o reflexionar todos los días, escuchar las máximas del hombre cualquiera, etc. Y la verdad es que me da pena que yo solo estoy disfrutando de este cambio, me gustaría que todos los que quiero estuvieran acá. Obvio que España no es un paraíso, todo lo contrario…jaja…estar en ésta región española es como vivir en alguna provincia argentina, con algunos problemas parecidos, la gente muy expresiva y gritona, pero también muy afectuosos. A su vez, aquí hay que distinguir bastante, como en nuestro país, del lugar donde se vive pero también la edad de la gente con la cual uno se relaciona. Desde los mayores a los menores: Las generaciones que vivieron bajo el régimen de Franco y que también han vivido la miseria española del siglo XX, son seres bastante conservadores con todo lo que ellos implica, ojo que no hablo sobre política, sino sobre su forma de ser. En cuanto a la generación que me toca son muy muy parecidos a los argentinos que están entre los 30 y 45, donde el comprar una casa está tan complicado como en argentina, pero han llegado a vivir el auge económico por lo que llegaron a comprarla o bien están con un hijo más: ¡su hipoteca! Por lo que están muy condicionados. Por último, entre la salida de la adolescencia y los 30. Creo que son los que tienen la cabeza más abierta, aunque también te encontrás con niños que no tienen idea de donde están parados, o sea IDEM a los de veintipico argentinos. La juventud española, no tiene demasiados prejuicios por sexo, o del lugar donde uno nació, o lo que fuera. Porque han vivido situaciones que han hecho que sean más abiertos en general, como por ejemplo, tuvieron compañeros de clase o de trabajo o lo que fuera, que eran originarios de otros países y eso les da otra visión de las diferencias.
Por el momento es todo.!!...hasta la próxima.
